El método Halliwick se basa en la flotabilidad del agua. Con él, las personas con discapacidad pueden moverse contra la gravedad.
Es que todos tenemos que explorar nuestro propio sentido del equilibrio en el agua y el método Halliwick es una terapia que también potencia la confianza en uno mismo. Conoce más sobre ella a continuación…
Terapia Halliwick: qué es
Es un método de aprendizaje de la natación y terapia en el agua para personas de todas las edades, tanto para discapacitados como para personas sanas.
El objetivo principal de este método es enseñarte a moverte y permanecer seguro y libre en el agua, lo cual se logra aprendiendo a controlar los movimientos de la cabeza, respirar y equilibrar el agua.
El método Halliwick es un método único de terapia de agua y lecciones de natación para personas con discapacidad, especialmente aquellas con trastornos neurológicos, auditivos y visuales, así como con trastornos emocionales.
El concepto se basa en la creencia de que las actividades acuáticas aportan grandes beneficios y que abarcan todas las esferas de la vida humana, influyendo en el desarrollo físico, social, cognitivo y lingüístico.
La forma de enseñanza es característica y única: un nadador adquiere nuevas habilidades mediante la participación en varios tipos de actividades acuáticas, juegos y juegos.
Rehabilitación en agua con el método Halliwick
El concepto Halliwick es adecuado para pacientes con Esclerosis Múltiple (EM) que presentan síntomas graves. En ese caso, el paciente puedes experimentar y practicar el ejercicio de manera diferente en el agua, que al hacerlo en tierra.
Cualquiera que esté sumergido en agua hasta la cintura, solo tiene que cargar el diez por ciento de su propio peso.
En ese caso, los efectos de flotabilidad, presión hidrostática y flujo tienen una influencia positiva en el comportamiento del equilibrio, la tensión muscular (tono) y el sistema cardiovascular.
Además, los movimientos lentos en el agua requieren menos tensión muscular y los espasmos pueden ser reducidos por la fuerza de flotación.
Especialmente con ataxia, debilidad muscular o trastornos de la marcha, las personas con Esclerosis Múltiple pueden practicar el movimiento y la postura en el agua. También, la inercia del agua permite más tiempo para reaccionar.
Otra ventaja es que no hay riesgo de caída, por lo que los errores de movimiento se pueden corregir más fácilmente. Esto aumenta la confianza en uno mismo y la motivación para el entrenamiento.
En el agua, las secuencias de movimientos funcionales ya se pueden practicar en la fase temprana de rehabilitación y con más repeticiones. Luego, se pueden transferir a la situación de gravedad en tierra.
Fisioterapeutas especialmente capacitados utilizan las propiedades específicas del agua en la terapia de agua de Halliwick, para así promover a los pacientes con Esclerosis Múltiple y activarlos en movimiento.
Halliwick: es una terapia activa que anima y desafía
El concepto Halliwick se remonta al británico James McMillan. En la década de 1950, este personaje dio lecciones de natación a niñas discapacitadas en la Escuela Halliwick de Londres, entrenando específicamente su estabilidad corporal en el agua.
Como resultado, las niñas desarrollaron habilidades motoras y cognitivas significativamente mejores, que aquellas que no habían recibido lecciones de natación.
Con su método de natación, McMillan sentó las bases para el desarrollo terapéutico posterior del concepto Halliwick, en una forma de terapia que utiliza las propiedades específicas fundamentales del agua y que requiere innumerables enfoques de resolución de problemas por parte del paciente.
Halliwick es una terapia activa que sirve para mantener o recuperar capacidades, como la estabilidad al sentarse o la prevención de caídas. Se pueden entrenar grupos de músculos individuales y mejorar su rendimiento de resistencia.
El terapeuta puede abordar específicamente los síntomas específicos de cada paciente con EM y adaptar su enfoque individualmente: solo apoyará a las personas tanto como necesitan para sentirse seguras.
Fases de la Terapia acuática método Halliwick
Durante el curso del tratamiento, el terapeuta guía al paciente a través de tres fases:
1. La adaptación espiritual al agua
El objetivo es poder moverse de forma independiente y sin miedo en el agua, reaccionar de manera específica y tener la respiración bajo control.
El terapeuta apoyará el control cuerpo-cabeza y los movimientos se realizan primero en posición erguida y pueden combinarse con ritmo, por ejemplo.
Además, el terapeuta adaptará su apoyo individualmente a las necesidades del paciente con Esclerosis Múltiple y reducirá gradualmente el apoyo.
2. El control de equilibrio
Esto debería permitir que las posiciones en el agua se controlen y mantengan a través del casco. Esto incluye girar en el agua, mantener el equilibrio sobre la espalda y deslizarse suavemente por aguas turbulentas.
En el agua, la flotabilidad hacia arriba debe equilibrarse con la gravedad hacia abajo para evitar la rotación del cuerpo. La terapia Halliwick utiliza esta rotación inducida físicamente para tratar los déficits en el sistema musculoesquelético.
El terapeuta ayudará al paciente a girar sobre diferentes ejes y a adoptar la posición supina.
Además, utilizará los efectos de flujo y flotabilidad del agua de manera específica, para perturbar el equilibrio de los afectados y desafiarlos a ajustar su equilibrio.
3. La locomoción
El objetivo es poder desenvolverse por su cuenta en el agua y adquirir habilidades básicas de natación.
El efecto de flotabilidad significa que las personas pueden permanecer en el agua sin ningún tipo de ayuda. Esto tiene un efecto psicológico importante: los afectados aprenden que pueden moverse con seguridad en el agua en cualquier situación.
Si el paciente tiene un buen control postural, el terapeuta lo ayudará a moverse en decúbito supino con la ayuda de movimientos simétricos de las manos.
Las sesiones de Halliwick
Las sesiones de Halliwick se llevan a cabo individualmente, para que cada nadador tenga su propio instructor que aplicará el apoyo adecuado, esto de acuerdo con las necesidades y capacidades del nadador.
Esto es independientemente de si el nadador está en forma o si tiene una discapacidad, ya que se busca que pueda utilizar plenamente sus habilidades y beneficiarse de todos los beneficios de juegos y actividades.
Por eso, entre otras cosas, las ayudas a la flotabilidad no se utilizan durante todo el proceso de aprendizaje.
Durante las clases, el nadador aprende a controlar la respiración y a conseguir posiciones seguras para respirar, así como a controlar el movimiento, que depende, entre otras cosas, de desde la adaptación mental y el control del balance hídrico.
La ciencia conduce a la mayor independencia posible y una absoluta sensación de seguridad, que se basa en un profundo conocimiento del medio acuático y la capacidad de controlar libremente los propios movimientos en él.
En este método se utilizan varios tipos de técnicas de apoyo, según el tipo y el grado de discapacidad.
Las técnicas están destinadas, entre otras cosas, a facilitando la correcta entrada y salida de la piscina, diversas formas de cambiar de posición utilizando la rotación, controlando el equilibrio, consiguiendo una posición de respiración segura.
Todas las sesiones son divertidas, colaborativas y competitivas. ¡Las clases basadas en Halliwick están abiertas a todos los que quieran jugar o aprender a nadar juntos!
Halliwick promueve la confianza y la motivación
El enfoque de Halliwick es integral: se promueve la función, la actividad y la participación. El paciente de Esclerosis Múltiple, puede establecer objetivos individuales y puede trabajar para alcanzarlos.
Dependiendo de la gravedad y los síntomas de la enfermedad, puede ser un objetivo, por ejemplo, aprender a nadar o caminar nuevamente y visitar nuevamente una piscina pública.
La terapia Halliwick aumenta la confianza en sí mismos, porque muchas personas con Esclerosis Múltiple descubren que están recuperando las habilidades que habían perdido. Esto aumenta la motivación para seguir entrenando.
Entrar y salir de la piscina, ducharse y vestirse, son habilidades cotidianas que se practican automáticamente. El terapeuta acompaña el paso de regreso a la vida normal y ayuda a promover actividades fuera de la terapia.
Cualquier persona interesada en la terapia Halliwick, debe preguntar en los grandes centros de rehabilitación si allí se ofrecen terapias ambulatorias. Sin embargo, la aplicación más común se encuentra actualmente todavía en el sector de pacientes hospitalizados.