El juego y el aprendizaje son esenciales para el desarrollo de los niños. Pero a menudo, cuando jugamos, olvidamos las habilidades y la comprensión que necesitamos para aprender. Es por eso que los terapeutas ocupacionales como usted son tan importantes: tienen el conocimiento y la habilidad para comprender cómo el juego puede ayudar a un niño a aprender cosas nuevas. Y JUGAR para aprender habilidades es una excelente manera de incorporarlo a su rutina diaria. Así es cómo…
Empieza con lo que ya sabes
Como terapeuta ocupacional, es probable que usted sepa más sobre la idoneidad del desarrollo de las actividades que cualquier otra persona de la casa. Esto significa que tendrá muchas oportunidades de probar nuevas actividades con su hijo que sean divertidas y productivas.
Empiece por lo que ya conoce: las actividades y habilidades de juego preferidas de su hijo. Por ejemplo, si a su hijo le encanta jugar con camiones, construya una pista y haga que compitan entre sí, o si le encantan las manualidades y es bueno coloreando, puede utilizar estas habilidades como punto de partida para su juego diario.
También puedes encontrar actividades que enseñen habilidades importantes para la edad actual de tu hijo y su etapa de desarrollo. Y aunque no te puedes equivocar con actividades que sean divertidas, también puedes buscar aquellas que sean educativas y que tengan el potencial de ayudar a tu hijo a aprender nuevas habilidades.
#Actividades de juego que enseñan habilidades Las actividades lúdicas que enseñan habilidades son una forma estupenda de hacer que tu hijo practique habilidades importantes para su edad. Por ejemplo, si tu hijo está en preescolar, las habilidades que son importantes para esta etapa de desarrollo incluyen los movimientos motores finos, la coordinación mano-ojo y la creatividad.
Durante una sesión de juego que incorpore estas habilidades, puedes animar a tu hijo a utilizar sus manos y explorar una nueva manualidad, hacer un dibujo o pintar una pared. También puede buscar actividades lúdicas que se ajusten a los intereses y habilidades de su hijo. Por ejemplo, si a su hijo le gustan los deportes, puede buscar juegos y actividades que incorporen habilidades como lanzar, atrapar y correr.
Jugar para aprender cosas nuevas
Cuando se juega para aprender cosas nuevas, se utiliza una actividad lúdica para enseñar una habilidad concreta y, al mismo tiempo, se aprende algo nuevo. Por ejemplo, con tu hijo sentado en la mesa pintando, puedes pedirle que pinte un dibujo de un camión circulando por la autopista.
En esta situación, la actividad de pintar es el centro de atención, mientras que lo nuevo es aprender sobre la imagen que ha pintado. Al tratar de integrar el juego con el aprendizaje, tienes la oportunidad de realizar ambas actividades a la vez. Y si eres un terapeuta ocupacional, esta puede ser una gran manera de integrar nuevas habilidades en tu rutina diaria.
Jugar a juegos que fomenten la confianza
Aunque las actividades que enseñan habilidades son importantes para fomentar la confianza, también conviene incluir actividades que ayuden a su hijo a adquirir confianza en nuevas áreas. Por ejemplo, si a tu hijo le encanta cantar, puedes pedirle que cree una canción que incorpore su conjunto de habilidades y que fomente la confianza en el proceso.
También puedes buscar actividades que incorporen una habilidad específica que le guste a tu hijo y que pueda ayudarle a ganar confianza. Por ejemplo, si a tu hijo le gusta dibujar, puedes buscar una actividad artística que incorpore la habilidad del sombreado. A medida que su hijo practica esta habilidad y adquiere otras nuevas, también puede aumentar la confianza en sus capacidades.
Jugar a juegos de fomento de la confianza
Aunque las actividades que enseñan habilidades son importantes para fomentar la confianza, también conviene incluir actividades que ayuden a tu hijo a adquirir confianza en nuevas áreas. Por ejemplo, si a tu hijo le encanta cantar, puedes pedirle que cree una canción que incorpore su conjunto de habilidades y que fomente la confianza en el proceso.
También puedes buscar actividades que incorporen una habilidad específica que le guste a tu hijo y que pueda ayudarle a ganar confianza. Por ejemplo, si a tu hijo le gusta dibujar, puedes buscar una actividad artística que incorpore la habilidad del sombreado. A medida que su hijo practica esta habilidad y adquiere otras nuevas, también puede aumentar la confianza en sus capacidades.
Conclusión
No hay mejor sensación que la de compartir una actividad divertida con tu hijo y ver cómo aprende, crece y se desarrolla como persona. Y realmente, ¿qué mejor manera hay de mostrar a los niños que jugar es algo serio que incorporando actividades basadas en habilidades para el aprendizaje? Tanto si busca una forma de introducir una nueva habilidad como de añadir una antigua a su rutina diaria, la mejor manera de hacerlo es jugando.