La enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia en los adultos mayores. Se estima que más de 5 millones de estadounidenses tienen la enfermedad de Alzheimer y se espera que ese número aumente. Actualmente existen más de 100 tipos diferentes de demencia. Hay varios tipos de demencia porque se derivan de diferentes causas.
La demencia puede ser causada por varios factores, como el envejecimiento, la genética, las lesiones cerebrales y ciertas condiciones médicas como la depresión u otros problemas psicológicos. Los terapeutas ocupacionales trabajan diariamente con personas que sufren de demencia.
Esta publicación de blog explorará algunas consideraciones comunes de terapia ocupacional para trabajar con personas con demencia, así como ideas sobre cómo puede incorporar la terapia ocupacional en su práctica para mejorar su experiencia de atención al cliente.
¿Qué es la demencia?
La demencia es una enfermedad cerebral que provoca la pérdida de memoria y la dificultad para pensar, planificar y resolver problemas. Es una enfermedad compleja que afecta a personas de todas las edades y géneros. Hay muchos tipos diferentes de demencia, y los más comunes son la enfermedad de Alzheimer, la demencia vascular y la demencia multiinfarto.
Las personas con la enfermedad de Alzheimer pueden experimentar pérdida de memoria además de otros problemas cognitivos como la disminución de la capacidad de realizar varias tareas, la disminución de la atención a los detalles, la disminución de la capacidad de planificación y el aumento de la confusión.
Las personas con demencia vascular pueden tener problemas de memoria derivados de los daños causados en el cerebro por la hipertensión arterial o la aterosclerosis (endurecimiento de las arterias). Las personas con demencia multiinfarto pueden experimentar una pérdida de memoria debido a los daños causados por una serie de infartos.
Consideraciones comunes de terapia ocupacional para trabajar con personas con demencia.
Hay algunos aspectos clave de la terapia ocupacional que pueden ser útiles cuando se trabaja con personas con demencia. En primer lugar, los terapeutas ocupacionales pueden considerar la incorporación de actividades que ayuden a mejorar la comunicación, como dibujar y escribir o hablar de las experiencias.
Esto puede ayudar a la comunicación de varias maneras. Puede ayudar a mejorar las habilidades lingüísticas, aumentar la capacidad de expresión de la persona, reducir el aislamiento y aumentar el compromiso social. También puede aumentar la capacidad de una persona para entender a los demás y comunicarse de forma no verbal.
Una comunicación eficaz también puede facilitar la búsqueda y la comprensión del origen de la angustia de una persona. Otro aspecto importante del trabajo con personas con demencia es ayudarles a mantener un sentido de estructura y propósito diarios.
Esto es especialmente cierto para las personas con la enfermedad de Alzheimer, donde los individuos pueden experimentar una pérdida de la estructura diaria. También puede ser útil incorporar actividades diseñadas para ayudar a las personas a mantener su salud, como el ejercicio, los patrones de alimentación saludable y la higiene del sueño.
Cómo puede incorporar la terapia ocupacional a su consulta para mejorar la experiencia de atención al cliente
Además de las recomendaciones generales expuestas anteriormente que pueden ser útiles para las personas con todos los tipos de demencia, existen consideraciones adicionales de terapia ocupacional que son especialmente útiles para trabajar con personas con la enfermedad de Alzheimer y otros tipos de demencia.
Una consideración importante es que los terapeutas ocupacionales deben estar familiarizados con los requisitos específicos de su estado para obtener la licencia y la atención. Esto le ayudará a asegurarse de que cumple las leyes estatales y federales, incluidos los requisitos de consentimiento informado y de que ofrece una atención que se ajusta a las preferencias y valores de la persona.
También puede ayudar a asegurarse de que ha recibido una formación para ser terapeuta ocupacional que incluye el trabajo con personas con demencia. Si está proporcionando cuidados a una persona con demencia, puede ser útil observar cómo su condición afecta a sus actividades y necesidades diarias.
Esto puede ayudarle a adaptar mejor las actividades que ofrece para satisfacer las necesidades individuales. También puede ayudar a aumentar su conciencia de cómo la condición de su cliente puede afectar a sus actividades y necesidades diarias.
Esto puede ayudarle a reconocer mejor cuándo su cliente puede necesitar ayuda con las tareas diarias. Los terapeutas ocupacionales también pueden utilizar sus experiencias de trabajo con personas con demencia para hacer recomendaciones sobre cómo mejorar la experiencia de cuidado de su cliente.
Por ejemplo, puede notar que alguien con demencia se frustra frecuentemente al intentar completar una tarea cuando tiene problemas para encontrar la información que necesita. Usted puede ofrecer ayuda con esto dirigiéndolos a la fuente de la información y ayudándolos a encontrar la información que necesitan.
Otras actividades que pueden resultarle útiles en el cuidado de personas con demencia
Ayude a sus clientes a mantener un estilo de vida saludable: comer bien, hacer suficiente ejercicio, mantener un horario de sueño regular, etc. Esto puede ayudar a prevenir los síntomas de la demencia. Ayude a sus clientes a mantener su higiene diaria, incluyendo el baño y el uso de los artículos de higiene que necesitan.
Esto puede ayudar a prevenir infecciones y otras complicaciones de salud que pueden ocurrir como resultado de vivir con demencia. Ayude a sus clientes a mantener su salud mental – esto puede ayudar a prevenir los síntomas de la demencia.
Conclusión
La demencia es una enfermedad compleja y grave que afecta a la persona que la padece, así como a sus seres queridos. Los terapeutas ocupacionales pueden desempeñar un papel fundamental para ayudar a abordar muchas de las necesidades y preocupaciones de las personas con demencia, proporcionando estimulación social y cognitiva, así como proporcionando apoyo para las actividades diarias.
Hay muchas formas de mejorar la experiencia de atención al cliente cuando se trabaja con personas con demencia. Desde asegurarse de que ha recibido la formación adecuada hasta trabajar con los requisitos específicos de su estado para la obtención de la licencia y la atención, puede asegurarse mejor de que está proporcionando la mejor atención posible a sus clientes.